Ducha o bañera

¿Vosotros sois de ducha o de bañera? Sinceramente yo no lo tengo muy claro, de hecho podría decir que cuánto más lo pienso más dudas tengo al respecto. A nivel decorativo, la realidad es que hay soluciones magníficas para ambos productos, pero a nivel de funcionalidad, comodidad o preferencia, pues la verdad es que dudo muchísimo y por eso no sabría qué recomendar en cada caso.

Vamos a analizar un poco la situación. La bañera es fantástica en muchísimos aspectos, ¿os imagináis un baño relajante de espuma con una copa en la mano y ninguna prisa por salir? Sería maravilloso poder hacer eso una vez por semana por lo menos, porque dejando a un lado el tema del derroche de agua la realidad es que es fantástico para reponer fuerzas y reponernos un poco al final de la semana. Ahora bien, ¿es realmente cómoda la bañera para todas las situaciones? Pues yo creo que no, sinceramente.

Familias con niños

Cuando en casa tenemos niños, sobre todo si son pequeños, es posible que echemos en falta una bañera si no disponemos de una de obra ya que la vamos a necesitar. Siendo muy bebés, normalmente se usan las típicas bañeras de plástico con reductores para bañar a nuestros peques, pero conforme van creciendo esas bañeras se quedan pequeñas pero los niños no van a aceptar las duchas rápidas fácilmente así que lo ideal es disponer de una bañera clásica, al uso, por lo menos hasta que nuestros hijos cumplan los 5 años. A partir de ahí tendremos que hacer de tripas corazón y empezar a ducharles aunque ellos prefieran la bañera porque si queremos contribuir con el medioambiente no podemos estar dando baños a nuestros hijos ni todos los días, ni cada dos días.

Familias con personas mayores

Ahora vamos al caso opuesto, y es que cuando se cumple cierta edad levantar las rodillas para entrar y salir de la bañera puede ser toda una odisea, e incluso peligroso si lo hacemos sin compañía.

Para una persona más o menos mayor, siempre va a ser más sencillo entrar en una ducha a ras de suelo que tener que entrar en una bañera, ya sea para darse un baño relajante o para ducharse en ese mismo espacio, por lo que tal vez sea interesante hacer la típica obra para cambiar bañera por plato de ducha llegado el caso. Según la empresa Baño Spacio esta reforma se puede realizar en 24 horas por lo que realmente una persona mayor no tendría que sufrir mayor inconveniente que tener que estar 24 horas sin usar la ducha, lo cual es bastante asequible.

Familias jóvenes sin hijos

En este caso tal vez puedas elegir según tus gustos sin tener que pensar más allá de lo que te apetece en ese momento aunque la verdad es que si piensas tener hijos el día de mañana, tal vez deberías mantener la bañera hasta que pasase esa fase. Si no vas a tener hijos o tienes clara la fórmula que vas a utilizar si quieres tenerlos a pesar de no tener bañera, entonces podrás elegir una u otra opción libremente, dependiendo de tus gustos y preferencias. En este caso, yo, no sabría qué elegir.

La realidad es que una ducha con una buena mampara de cristal en una ducha a ras de suelo crea una sensación de amplitud que la bañera no puede darnos. Las mamparas más sencillas, sin adornos en el cristal ni efectos moteados, son las más elegantes y las que más amplitud consiguen proyectar, a pesar de que si vives compartiendo piso tal vez no sea lo más adecuado (sobre todo si comparten baño).

Ahora bien, esa amplitud, a pesar de tener un cuarto de baño de dimensiones reducidas, podemos conseguirla mediante otras técnicas como conseguir que el blanco predomine sobre cualquier otro color en la estancia, optar por la luz natural frente a la artificial si podemos elegir y utilizar muebles de baño adaptados al espacio. Las empresas especializadas aseguran que lo mejor es medir el espacio para fabricar un mueble personalizado capaz de cumplir con las necesidades básicas sin que ocupe ni un milímetro más de lo necesario.

Pros y contras de la bañera

Ventajas

  • Comodidad: no hay nada como un buen baño para sentirte como nuevo, sobre todo si tu bañera es espaciosa.
  • Niños: si tienes niños comprobarás que es mucho mejor disponer de una que pelearte con ellos cada vez que quieras ducharlos.
  • Estética: esto es un poco cuestión de gustos pero por cultura no hay nada más elegante que tener un baño amplio con una bañera grande a tu disposición (siempre y cuando hablemos de un baño bien cuidado, higiénico y bonito).

Desventajas

  • Ocupan mucho espacio: si tu cuarto de baño no es muy amplio será un gran inconveniente tener una bañera ocupando la mitad del suelo.
  • Incómodas para acceder: tener que entrar y salir de una bañera es mucho más incómodo que hacerlo de una ducha, sobre todo si esta está a ras de suelo.
  • Menor gasto de agua: ducharte siempre es más económico que un baño, pues se gasta menos agua, y así de paso ayudamos al planeta.
  • Se pierde más tiempo en un baño que en una ducha.
  • Las bañeras causan más accidentes que las duchas estadísticamente hablando:
    • Asfixias por sumersión no intencional
    • Ahogamientos por descuido
    • Resbalones al entrar o salir de la bañera
    • Accidentes por electrocución al caer un pequeño electrodoméstico en la bañera (secadores de pelo, radios, afeitadoras, etc.)
    • etc.

Innovación

No obstante actualmente hay una nueva opción que podría ser la solución perfecta para quienes, como yo, tienen bastantes dudas al respecto. Se trata de una bañera con apertura frontal a ras de suelo para que, estando la bañera vacía, se pueda acceder cómodamente al espacio como si de una ducha se tratase. En el caso de querer darse un baño basta con fijar la parte inferior de la mampara que actúa como puerta a los laterales de la bañera (con cierres herméticos y estancos que lleva instalados) y podrás utilizar tu bañera de forma cómoda como hacías con la bañera de obra clásica.

Lo que pasa es que ahora mismo tanto el precio de este producto como su instalación es realmente elevado, por lo que está al alcance de unos pocos afortunados. Además, luego está el tema de que ante un deterioro, cualquier arreglo o cambio en este tipo de bañeras/ducha debe ser infinitamente más caro que si tienes una ducha o bañera normal.

Lógicamente si disponemos de un más de un cuarto de baño en la vivienda podemos tener tanto ducha como bañera y usarlos dependiendo de las preferencias de cada conviviente, o dependiendo de su necesidad, pero cuando hablamos de viviendas de más de diez años lo normal es que el número de baños disminuya drásticamente y de ahí que sea tan importante elegir adecuadamente la mejor opción para nuestra familia.

Algunos consejos

Sea cual sea tu decisión final, hay algunos aspectos importantes que no debes olvidar:

  • Toma bien las medidas del espacio que dispones para decidir entre bañera o ducha.
  • Si decides optar por la ducha, piensa si quieres sustituir la bañera por un plato de ducha de la misma medida o si prefieres una ducha de obra que te dará más libertad de medidas.
  • Ten en cuenta el cambio de grifería que será necesario si pasas de bañera a ducha. Actualmente la variedad de estilos y prestaciones es muy amplia y adaptable a todos los gustos y necesidades.